Así de engalanado ha podido verse este fin de semana al caballo del recinto ferial de Mairena del Alcor. Quizás los jóvenes que durante los fines de semana se concentran allí haciendo botellona no encontraron mejor diversión que ataviar al equino que esculpieron los hermanos Antonio y Jesús Gavira. La cosa tiene su gracia (para unos más que para otros, desde luego), pues lo cierto y verdad es que al menos por esta vez la escultura de bronce se ha librado de graffitis y destrozos mayores, como puede verse en la foto no ha ocurrido con el muro posterior que remata el monumento.

Un monumento que homenajea a las parejas gitanas que tradicionalmente dieron vida y sentido a la feria de Mairena llegando hasta ella masivamente para hacer tratos de ganado. Episodios como éste no son la primera vez que ocurren a la estatua, objeto de atención de desaprensivos en otras ocasiones. De hecho, el Ayuntamiento ha tenido que practicarle limpiezas a fondo y retoques en más de una ocasión para dejarla a punto antes de la feria.

Un poco más de civismo entre los jóvenes que allí se divierten no estaría de más, sobre todo con un conjunto escultórico como éste, que muchos pueblos ya quisieran tener para sí y que los maireneros poseemos desde 1982. No está bien que la gran estatua luzca así como se la vio hasta que los operarios de la limpieza se percataron de ello y la despojaron de un lastre de tan mal gusto.