La Cueva del Vaquero de Gandul se halla en su fase final de restauración, incluyendo el vallado de su entorno para protegerla. 33.000 euros es el coste de los trabajos, que aporta la Consejería de Cultura y en los que interviene el Ayuntamiento de la vecina Alcalá de Guadaíra en unas obras en marcha desde el pasado mes de noviembre, con proyecto del arquitecto Enrique Domínguez.

La mala política de preservación de ese monumento con 3.000 años de antigüedad había puesto en peligro su pervivencia. De hecho, las paredes de esta cámara funeraria prehistórica, un enterramiento calcolítico descubierto a finales del siglo XIX sin que desde entonces se hubiera practicado ninguna intervención, presentaban riesgo de desprendimiento.

Laura Ballesteros, concejala de Cultura de Alcalá, ha corroborado los muchos ataques vandálicos que ha padecido el monumento en los últimos años, como tantas veces han denunciado las asociaciones conservacionistas de la comarca. Así, la edil ha reconocido la relación causa efecto entre las prácticas de karst, motocross y pruebas de carros blindados realizadas en sus aledaños y el ruinoso estado de conservación del dolmen.

Para la acometida de los trabajos, que contemplan asimismo la limpieza, adecentamiento y señalización de su entorno, se han tenido que pedir los permisos pertinentes al Ministerio de Defensa, propietario de los terrenos sobre los que se asienta la tumba, situada junto a las del Término y La Casilla, frente a la mesa de la ciudadela de Gandul y un columbario romano, todo ello en un enclave donde se estima la existencia de al menos 30 yacimientos arqueológicos, la mayoría de ellos sin excavar.

Pasos para el Parque Cultural.- A colación de la difusión pública de esta intervención, Laura Ballesteros ha informado de que a lo largo de 2008 una comisión de técnicos en patrimonio y arqueólogos han iniciado, impulsados por el Consistorio panadero, la elaboración de un documento que establezca las bases para la puesta en valor de todo el área de Gandul en torno a la figura de Parque Cultural. Es intención de las autoridades de la vecina ciudad implicar en el mismo a la Universidad de Sevilla.