El Congreso dedicado al Centenario del nacimiento de Antonio Mairena, que se ha celebrado los días 28, 29 y 30 de octubre en Sevilla, se ha cerrado con un gran éxito. De hecho la gran demanda de inscripciones superó considerablemente las previsiones iniciales y forzó a la organización a buscar un lugar más amplio donde celebrar las sesiones académicas. Finalmente estas tuvieron lugar en el salón de actos de la Fundación Tres Culturas del Mediterráneo, ubicada en el Pabellón Hassan II, junto al monasterio de la Cartuja.

Pie de Foto: José Manuel Navarro Domínguez, historiador, Antonio Cruz, miembro del comité organizador, Francisco Perujo, director de la Agencia Andaluza para el desarrollo del Flamenco, Rafael Escuredo, ex presidente de la Junta de Andalucía y Juan Manuel Suárez Japón, Rector de la Universidad Internacional de Andalucía.

De su importancia es buena muestra el hecho de que este congreso homenaje al Maestro lo organicen la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco y la Universidad Internacional de Andalucía y cuente con la colaboración el Centro de Estudios Andaluces, la Fundación Tres Culturas del Mediterráneo, la Universidad de Sevilla, la Universidad Pablo de Olavide y la Fundación Antonio Mairena.

La ceremonia inaugural reunió en el Paraninfo de la Universidad hispalense a representantes de las mas más altas instituciones andaluzas vinculadas con el flamenco y su estudio, como la consejera de Cultura, Rosa Torres, Francisco Perujo, director de la Agencia para el desarrollo del Flamenco, el rector de la Universidad Internacional de Andalucía y director académico del congreso, Juan Manuel Suárez Japón, y Joaquín Luque, rector de la Universidad de Sevilla.

Los distintos estudiosos han puesto de manifiesto la condición de Clásico, de Antonio, pieza clave y base ineludible de cualquier aproximación al mundo del flamenco. El escritor José Manuel Caballero Bonald, en la conferencia inaugural le calificó de "pontífice", recogiendo acepción latina del término "constructor de puentes" entre la herencia de sus mayores y las generaciones posteriores a las que la transmitió. En este sentido ambos rectores recordaron el papel crucial jugado por Antonio en la introducción del flamenco en la universidad, recordando aquellas famosas jornadas flamencas celebradas en el Aula Magna de Derecho de la Universidad de Sevilla en 1969.

La primera sesión académica, presidida por Antonio Cruz, sobrino del maestro, tuvo lugar el 28 de octubre por la tarde y se centró en el análisis de la vida de Antonio Cruz García. La mesa redonda, moderada por Manuel Curao, contó con la presencia de Manuel Morao, Juan Peña "El Lebrijano", Matilde Coral y Antonio Fernández. A su finalización fue proyectado el documental "Rito y Geografía del Cante", de José María Velázquez-Gaztelu. Contaron vivencias y anécdotas: Antonio Fernández, el guitarrista jerezano Manuel Morao,la bailaora Matilde Coral y el cantaor Juan Peña "El Lebrijano".

La segunda sesión, presidida por Antonio Reina, médico, presidente de la fundación Antonio Mairena, contó con las conferencias del guitarrista Pedro Peña, guitarrista lebrijano que le acompañó en muchas ocasiones que comentó la labor de Antonio Mairena en la recuperación de cantes y cantaores e ilustró su conferencia cantando las diferentes soleás que Antonio había interpretado.

Por su parte el periodista de la cadena SER Ildefonso Vergara habló sobre Las tertulias flamencas de Radio Sevilla en la obra de Antonio Mairena, ilustrando su intervención con diversas grabaciones conservadas en lo archivos de la cadena. Emilio Jiménez Díaz, veterano escritor de temas flamencos desglosó su la relación entre Antonio Mairena y los intelectuales en una conferencia cuajada de anécdotas de su trabajo en la revista Sevilla Flamenca y sus programas en Radio Popular.

En la tarde del jueves el veterano crítico de flamenco, conferenciante y presentador varios años del Festival de Mairena, Manuel Martín Martín, expuso su visión sobre El mairenismo, hoy, la actualidad de las pautas del arte marcadas por el maestro y el camino andado por sus seguidores. A continuación, en la mesa redonda, moderada por Tere Peña, analizaron la obra del Maestro los estudiosos Luis y Ramón Soler, el cantaor mairenero Calixto Sánchez, la bailaora Pepa Montes y el crítico Ángel Álvarez Caballero.

El viernes 30 abrió la sesión Antonio Carmona. Profesor de Literatura, quien disertó sobre El pensamiento de Antonio Mairena. Le siguió en la tribuna José Manuel Navarro Domínguez, historiador local y autor del Mairena y el arte flamenco. Presentó un amplio recorrido por el Festival de Mairena, tema que lleva tiempo investigando, y ofreció nuevos datos desentrañados desde que ya avanzase un primer esbozo en su conferencia presentada en la Casa Palacio en septiembre de 2004, en los actos celebrados con motivo del Congreso Internacional de Flamenco.

Finalmente el cierre al congreso lo puso Rafael Escuredo, ex-presidente de la Junta de Andalucía que firmó su nombramiento como hijo predilecto de Andalucía. Desde el atril fue hilvanando anécdotas y recuerdos de su relación con Antonio, en una rica y emotiva conferencia en la que demostró una prodigiosa memoria y no menores dotes oratorias.

Como complemento de las sesiones académicas se inauguró, en la sede de la Fundación Tres Culturas, la exposición itinerante que muestra imágenes de Antonio Mairena procedentes del archivo gráfico de la Agencia EFE y del archivo de la familia Cruz García. La Universidad de Sevilla ha reeditado el libro Las Confesiones de Antonio Mairena, publicado por primera vez en 1976, y la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco ha reeditado el ejemplar extraordinario que la mítica revista Candil de Jaén dedicó en 1982 a Antonio Mairena y un numero especial de la revista La nueva alboreá, dedicado también al Maestro. El director de la Agencia para Desarrollo del Flamenco presentó el disco-libro "Antonio Mairena, gitano y andaluz", editado por Tere Peña y Alfonso García, que recoge tonás, soleares, alegrías, seguiriyas, malagueñas, tientos-tangos, bulerías y una saeta grabados en fiestas privadas y la casa del Arte Flamenco de Mairena entre 1960 y 1980.