(20-noviembre-2009) Opinión: Paisaje de Los Alcores: una protección de cartón piedra


Informa: David Roldán

Los Alcores es una comarca singular que constituye una unidad geológica y
paisajística insólita y uno de los conjuntos históricos y arqueológicos más
importantes de España, todo un tesoro. En la Memoria de Información del
POTAUS, punto 2.5 se reconoce que* “el escarpe de Los Alcores constituye un
recurso paisajístico de primer orden.”*

Desde hace unos años organizaciones culturales y ecologistas venimos
impulsando una campaña en favor del Parque Cultural de Los Alcores, un órgano
de gestión que serviría para poner en valor el exuberante patrimonio ambiental
y cultural de la comarca y también para garantizarle una protección integral
que ponga freno a su vulnerabilidad.

Mientras llega el ansiado día en que el sueño del Parque Cultural se hace
realidad, conviene recordar lo ineficientes -por hueras- que han sido figuras
de protección como la de los Paisajes Sobresalientes. Los Paisajes
Sobresalientes (PS) recogen espacios de reconocida singularidad paisajística
con notables rasgos geomorfológicos, botánicos y faunísticos, caracterizados
por una relativa uniformidad y por una gran calidad visual. En estos espacios
se prohíbe, en teoría, cualquier uso o actividad que pueda implicar
degradación de los valores paisajísticos. *Pero en la práctica esta protección
es muy débil, de cartón piedra, *al menos en nuestra comarca. En la Cornisa de
Los Alcores contamos con dos Paisajes Sobresalientes recogidos en el Plan
Especial de Protección del Medio Físico de Sevilla: el PS-1 y el PS-2. Durante
años las administraciones con competencias en disciplina urbanística y en
defensa del medio ambiente han hecho gala de una perversa inhibición ante las
agresiones a las que han sido sometidos: construcciones ilegales,
aterrazamientos, pastoreo incontrolado, vertederos,
deforestaciones, quema de rastrojos, etc. A la falta de persecución de los
atentados al medio se ha sumado la falta de restitución de las cosas a su
estado original y la escasez de medios destinados a la salvaguarda de los
bienes patrimoniales, en resumen, la omisión del deber de conservación.

Pero, por desgracia, no es la actitud pasiva de las administraciones lo único
preocupante. También genera desazón su actuación destructiva en estos
espacios, mal llamados protegidos. *Me refiero al impacto de* *las gigantescas
obras del trazado del AVE sobre las entrañas del PS-1 y sus alrededores.* Al
margen de los desmontes,* el enclave elegido para el emboquille de los dos
túneles no puede ser más desatinado*, pues se va a realizar en un lugar muy
valioso, donde precisamente hay un gran cúmulo de importantes yacimientos
arqueológicos. Tan es así que, recientemente, el Colectivo Ecopacifista Solano
ha dado a conocer un yacimiento inédito -la muralla occidental del poblado
orientalizante de Alcaudete- la cual será destruida por el TAV, si antes la
cordura no se impone y la Consejera de Obras Públicas se presta a modificar el
trazado mediante un túnel algo más largo y profundo. Hasta la propia
Delegación Provincial de Cultura ha reconocido que *“el hallazgo viene a
redundar en la riqueza arqueológica de la zona”.*

Sin duda, la facilidad con la que hoy día se cuelan impactantes obras de
infraestructuras por estos lugares, que habría que esforzarse en preservar, es
otra de las cuestiones a revisar para que una figura de protección sea digna
de tal nombre, en vez de un clamoroso engaño.

DAVID ROLDÁN SÁNCHEZ
MIEMBRO FUNDADOR DEL COLECTIVO ECOPACIFISTA SOLANO DE EL VISO DEL ALCOR