Las Mancomunidades
de Los Alcores y Guadalquivir se sumarán a él con la Diputación
para gestionar el 80% de los residuos de la provincia.
Las aproximadamente 600.000 toneladas de residuos que produce el área
metropolitana de Sevilla al año serán gestionadas a partir
de 2016 por el Consorcio Central de Residuos, una nueva entidad cuya creación
se aprobó en Diputación hace unos días para tratar
los residuos urbanos de los 33 pueblos que suman en la actualidad las
mancomunidades de Los Alcores y Guadalquivir, que dan servicio a más
de un millón de habitantes.
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Sólo el PSOE
de la Diputación, que también participará en el nuevo
consorcio que aspira a coordinar la recogida y tratamiento de las basuras,
aprobó la medida, a la que se opuso el PP mientras que IU y el
PA se abstuvieron en la votación. El portavoz popular Juan Francisco
Bueno se opuso "porque no es bueno engordar más la administración
en tiempos de crisis" y "porque la mayoría de los pueblos
afectados no se han manifestado". Mientras que desde IU-CA Manuel
Gutiérrez señaló que las mancomunidades tienen ya
"recursos suficientes para no tener que crear un consorcio así
sino que podrían firmar convenios de colaboración para mejorar
el servicio." Por su parte, el Partido Andalucista criticó
la creación del nuevo consorcio con el argumento de que al final
producirá un inevitable aumento de las tarifas.
En defensa del Consorcio Central de Residuos, que comenzará a funcionar
en enero de 2016 coincidiendo con la expiración de la concesión
del vertedero y la planta de tratamiento de Cónica Santa Marta
en Alcalá de Guadaíra, el presidente de la Mancomunidad
de Los Alcores, el socialista Alfonso Mir (a su vez delegado de Seguridad
del Ayuntamiento de Sevilla) sostuvo que "no es algo que nos inventemos
sino una necesidad", afirmación en la que coincidió
con el alcalde de La Puebla del Río y presidente de la Mancomunidad
Guadalquivir, Julio Álvarez (PSOE), quien expuso que la creación
del consorcio va encaminada "a la búsqueda de un modelo de
gestión de residuos que sea eficaz y sostenible".
En relación al mismo, el presidente de la Diputación, el
asimismo socialista Fernando Rodríguez Villalobos, explicó
que significa el cumplimiento de un objetivo de principios de legislatura
tendente a dotar de unidad todo el ciclo integral de recogida y tratamiento
de residuos de la provincia. Algo que en la práctica se traducirá,
aseveró, en reducir la contaminación y emisiones, recuperar
el máximo de residuos para reutilizarlos tras ser reciclados, y
procurar enterrar los menos posibles.
Ahora, una vez aprobado el futuro consorcio, comienza la fase de redacción
de sus estatutos y la constitución de un órgano con sus
representantes, lo que ocurrirá a partir del próximo mes
de septiembre.
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